Con la ayuda de un cuchillo, cortar la parte baja del pie de la seta para evitar los restos de tierra.
A continuación, con un cepillo o un trapo húmedo limpiar cuidadosamente. Para eliminar el exceso de tierra sumergirlas en un bol con un poco de agua y lavarlas rápido.
Prestar atención al interior del pie, al ser huecas pueden mantener ciertas impurezas en él.
Dejar secar sobre un papel de cocina para quitar el exceso de agua.
Preparar los huevos
Poner al fuego la cazuela con abundante agua y llevar a ebullición.
Cubrir un cuenco pequeño con un trozo de film de cocina y untarlo con un poco de aceite de oliva virgen extra para que después el huevo se despegue solo.
Cascar el huevo y ponerlo en el interior del film, añadir una pizca de sal y pimienta.
Cerrar el film formando un saquito evitando que quede aire en el interior y cerrarlo con hilo de cocina o con una pinza.
Repetir con el resto de huevos.
Introducir los huevos en el agua y cocerlos de 2 a 3 minutos. Tienen que estar blandos.
Reservarlos en agua fría.
Montaje del plato
Laminar los dos dientes de ajo.
Calentar 50 ml de aceite de oliva en la sartén. Añadir los ajos, las setas y rehogarlas hasta consumir todo el jugo de las setas.
Colocar la setas en el fondo del los platos y poner sobre ellas los huevos escalfados.
Espolvorear un poco de sal maldon y cebollino sobre el huevo.